El tiempo pasó muy rápido para Pilar y Rafa, tanto que fue a penas cuando faltaban 5 días para su boda cuando conocí a Pilar.
Un día tan especial para ellos, sus familias y amigos no podía quedar solo en la memoria, así que me alegro de haber sido parte de lo que serán sus recuerdos para siempre con este vídeo.
Agradecí mucho la naturalidad de Pilar, Rafa y sus familias. Rodeados de preciosos escenarios y sintiendo las emociones del momento, me permitieron disfrutar de un día único e irrepetible.
Espero que de nuevo puedan volver a sentir algo tan bonito.